Cinema Sonum, la innovadora propuesta cordobesa de cine con música en vivo, llevó a cabo la segunda entrega de la trilogía Before. Antes del atardecer, especial primavera.
Córdoba18 de septiembre de 2025
Lucrezia Bonaccorso
Si el amanecer en Viena fue la melodía de lo que podía ser, ese relámpago que con veinte años nos desacomoda, el atardecer en París es todo lo contrario. Before Sunset no es la continuación de un romance, sino el registro de una herida sin sanar. Richard Linklater (director) no solo nos devuelve a Jesse y Céline, sino que nos hace cargar con el peso de la promesa rota de hace nueve años atrás. Esta vez, el encuentro no es casual y la atmósfera tampoco es despreocupada, sino de una tensión y añoranza palpables en cada segundo de trama, porque sabemos —y los protagonistas saben— que tienen una cuenta pendiente con esos jóvenes veinteañeros que supieron ser.
En la presentación de esta secuela, la noche del 17 de septiembre experimentamos la colisión de la fantasía con la realidad. El desarrollo del film fue acompañado, al igual que en la primera entrega, en el auditorio de la UCC (Obispo Trejo 323) con la música en vivo que nos brindaron Leandro Murat (piano) y Ayelén Bustos Marrero (chelo), con piezas únicas y exclusivamente creadas y elegidas para la ocasión. Leandro, quien también presentó la película, contó que hizo una selección detallada y agregó melodías en aquellas partes que no tenían música originalmente. El resultado fue de una extrema belleza y nostalgia, tanto en las notas musicales como en los diálogos que caracterizan esta segunda entrega. También hubo una serie de preguntas del público que fueron respondidas por el presentador, donde pudimos apreciar lo que significaba para él poder recrear arte con películas independientes y románticas. Justamente, esta proyección fue el especial para recibir la primavera.
Durante las casi dos horas de duración, apreciamos a la pareja que nos atrapó a todos en Before Sunrise, casi una década más tarde, con vidas inesperadas, compromisos y asuntos sin cerrar aún latentes. Jesse, un novelista que de alguna forma resguardó su mayor recuerdo en un libro que terminó siendo un éxito, mientras Céline se centró en el activismo y compromiso con problemáticas globales a modo de escape de enfrentar su vida emocional. Sus diálogos en este momento de la historia ya dejaron de ser un juego filosófico; son una suerte de proceso terapéutico donde, a través de matrimonios fallidos y frustraciones personales, intentan entender por qué aquella noche en Viena les impidió ser felices con el curso de la vida que devino y que construyeron, cada uno por su lado.
La incertidumbre emocional de la película late al ritmo de la pregunta: ¿Qué hubiera pasado sí?"
La conversación, inevitablemente cae en la agonía de aquel 16 de diciembre, que encontró a Jesse esperando y a Céline imposibilitada de llegar a cumplir la promesa de un posible reencuentro. Todo aquel peso desborda en la escena del taxi, donde ella desprende esa angustia permanente que hasta entonces mantuvo disfrazada de indiferencia. Before Sunset es un estudio sobre el arrepentimiento, pero también, sobre el flujo de la vida y lo inesperado que no siempre está bajo nuestro control, y es por eso que una gran impotencia se despliega en las vidas que los personajes cargan en la actualidad. Y de alguna forma, cómo una conexión genuina puede contaminar todas las relaciones posteriores. Ambos se miran, ríen, se sinceran con el otro y ven lo que sus vidas podrían haber sido, y ese fantasma es más real que cualquier ciudad en la que se encuentren.
A diferencia de Viena, en París el inminente vuelo de Jesse funciona como un reloj narrativo brutal, que los presiona a atesorar lo esencial antes de que sea tarde. El director, Linklater, nos atrapa en esta cuenta regresiva con sus características tomas largas y planos secuencia que dan la sensación de estar ahí mismo, sufriendo el paso del tiempo y la urgencia, pero a la vez dejándonos llevar por los diálogos naturales y extremadamente cercanos que se lucen con todo el brillo que desborda el guión. Es una carrera inédita a contrarreloj para rescatar no solo una relación, sino, quizás la última chance de una vida más feliz.
Se espera la última entrega de esta trilogía prometida por los artistas de Cinema Sonum muy pronto, la cual nos va a dar finalmente la promesa hecha cuerpo de ese amor que deviene de años y se resguarda en los libros.
El amor y la sensualidad brotan en todas sus formas. Y para una comunidad como la del BDSM (Bondage; Disciplina y Dominación; Sumisión y Sadismo; y Masoquismo), llevar adelante ciertas prácticas que abarcan un amplio espectro de deseos y dinámicas consensuadas es mucho más que un desahogo pasional y carnal transitorio, es un estilo de vida.
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